Hace una semana, estaba en una fiesta de Navidad organizada por el departamento de Recursos Renovables. Ya saben, para relajarse entre colegas. La cuestión es que charlando con uno de los profesores (un punk muy macanudo) me comenta que el invierno se le hace cada vez más dificil por la oscuridad, y que le cuesta salir de la casa, especialmente cuando su tostadora le dice que se quede haciendo güevo. Entonces, después de dos cervezas me pregunta: "¿vos también hablás con tu tostadora?". Tristemente le tuve que responder: "mi tostadora ya no me contesta".
Yo la arreglé una vez. Ale la arregló otra. Ya no tiene arreglo. "Pero si es sólo una tostadora!", escucho exclamar. Ja! Desafío a quien sea a encontrar una tostadora con las siguientes características:
- Buena. O sea, mecánicamente estable, no hecha en China con alambre dulce.
- Simple. Lo único que quiero es que tueste una rodaja de pan, no que descongele un pollo y lo haga al espiedo.
- Barata. Es una tostadora por todos los caracúes!!!
- Si es posible, agradable a la vista, minimalista.
- De tamaño apropiado. No necesito que tenga 7 capas de aislación para no quemarme. Ya sé que está caliente.
Visto todo esto, creo que no voy a volver a tener una tostadora hasta que la fabrique yo mismo. Todo lo que he visto en el mercado es la antítesis de mi síntesis. La historia del [no-]consumidor en mí.
Alguna piezas célebres:
Los Oilers. Esto es patético a más no poder. Estúpido al cubo.
La tostadora de Homero. Estoy considerando hacerle estas modificaciones a la mía. Qué mejor forma de viajar al pasado que mientras se hace una tostada!
Las tostadoras voladoras. Estas me gustan porque son la versión "software libre". Difíciles de pezcar las tostadas lo único.
Pero mi favorita es la vieja tostadora de chapa, con una rejilla, que se ponía al fuego y se hacían un montón de rodajas de flautita o miniones pa la leche. Lástima que acá las cocinas son eléctricas.
Feliz 2010 ;-)
