yogurtu nqué?

Antes que nada, no me quiero copiar de Ale con sus recetas. Mi blog es mucho más errático, naturalmente. Yo=quilombo. Hace rato que vengo haciendo yogurt casero. Hace rato que vengo fermentando porquerías por ahí... mmmmm fermentaaaar aaghgahgahgahga. El yogurt es, básicamente, leche fermentada. A la gran mayoría de los lactobacilos y bacilos relacionados no les calienta, me imagino, si lo que fermentan es leche o no, con tal de que tengan una linda fuente de azúcar en concentración moderada (dicho sea de paso tampoco se los calienta, ojo si no se los mata). Después de la exitosa ingestión de panqueques de coco, quedó 1/8 de lata de leche de coco en la heladera. En un acto completamente no relacionado, yo había adquirido un coco fresco del mercado para hacer un licuado de yogurt con coco. Pero viendo que tenía una buena fuente de inóculo y unos lindos ingredientes me empezó a trabajar el balero. Una punta piccola de leche de coco + un peu de agua de coco fresca + igual volúmen de leche + dos cucharadas de yogurt fresco = yogurt de coco!

No me voy a calentar en escribir la receta. Si les interesa pídan y atualizo el bló con la misma. Lo único que voy a comentar es mmmmmmmm. Servido con alguna fruta tropical fresca como un mango, es un postre simple, recontrasuper sano y un boccato di cardinale.

Yo le agregé leche de vaca para tener más producto, pero de contar con suficiente leche de coco entiendo que es en sí misma fermentecible. Dudo que quede con buena consistencia lo único. Las porquerías de la leche ayudan a que flocule de forma más concreta. Igual, el yogurt casero no es tan firme como el comprado, porque al comprado le agregan gelatina. Giles gélidos gelatinosos. El casero es mucho mejor y mucho más barato. En Argentina te matan por un pote de yogurt. Y además no hay cultura del yogurt. En una época se habían puesto de moda las yogurteras, pero con un poco de ingenio gaucho no hace falta. Por favor, si prueban hacer yogurt casero ya sea de leche o de coco... no le agreguen azúcar ni edulcorante. En esta era moderna se ha perdido el gusto por lo sofisticadamente ácido, agrio o amargo, en favor de un simple dulzor globalizado.